23 jul 2009

Continuidad en Comics II: Personajes e Iconos

(Luego de un laaaaargo receso retomo el texto donde lo deje. Las siguientes entregas serán semanales. Atentos a ellas.)

Como decía Eco, ( y en la primera parte de este blog, mucho tiempo atrás) los personajes no pueden avanzar en el tiempo sin consumirse a si mismos. Si lo haces terminaras arruinando aquello que te produce dinero. Solo miren los Simpsons y como han sido administrados creativamente. Parece que el tiempo pasa solo para algunos de los personajes. Hay capítulos que rememoran la juventud de Homero y Marge en los 70, 80 y 90 pero nunca olvido el capítulo donde Lisa recibía una visión del futuro donde era adulta y se casaba…

¡en el año 2008!

Si empezamos a ponernos quisquillosos en la continuidad de los Simpsons, descubriremos que no se sostiene. ¿Pero le importa eso a alguien? Lo que importa es que la serie entretiene y vende (esa es la palabra clave en todo este artículo) y seguirá en cartelera hasta que deje de llamar la atención. Después de todo aquello que estorba en la venta del producto, debe ser desechado, ignorado u olvidado y nos quedamos con los arquetipos y como funcionan: Homero hara tonterias, Marge será quejumbrosa, Bart travieso, Lisa sera la conciencia moral y Maggie chupara su chupete.

Hace un año Marvel comics realizó una movida arriesgada: reseteo parte de su historia. Uno de los pilares de la continuidad del universo de esta editorial fue cambiado: Spider-man, el héroe arácnido bajo circunstancias narrativas que provocaron mucha polémica, renunció a su matrimonio por salvar la vida de su tía may. A raíz de eso Spider-man fue mágicamente divorciado… perdón la realidad es que nunca estuvo casado, por lo que no existió el divorcio.

Dejando de lado las reacciones de los aficionados más tradicionalistas o las polémicas tras bambalinas o las posibles inconsistencias narrativas, la historia Un dia más logro el objetivo que buscó antes la tristemente celebre saga del clon: devolver a Spider.man a la soltería, devolver al juego a un Spider-man más similar al personaje original, un adolescente perpetuo, un perdedor agradable y empatito que tiene que luchar día a día por salir adelante y luchar como Spider-man a pesar del rechazo de la sociedad. Todo eso ha vuelto, sacando del contexto a Mary Jean y dejándolo soltero. ¿Por qué romper con esa historia? Porque Marvel es un negocio y sabe que las historias que quiere su mercado son las del Peter Parker alegre que lanza bromas en medio de la acción. Pero tras todas las aventuras que dejan su marca el personaje se había alejado de los conceptos que vendían, se alejo de su publico objetivo y habia que rescatarlo. Regresar a lo que vendía: el Peter Parker adolescente vende, ya lo demostró Bendis en la serie Ultimate. Pero no era posible que la copia superara al original. Asi que el original, pacto con el diablo autocancelado, regresa a una semi-postadolescencia evocativa del spider-man prematrimonial, lo que era de alguna manera durante la primera mitad de los 80s.

¿Por qué tirar por la ventana la evolución del personaje? Porque es el Peter adolescente anonimo y soltero perdedor, es el que reconocen las masas, el que habita las películas y los dibujos animados. En los presentes tiempos, la competencia en el mundo del entretenimiento es mayor que nunca, con otras formas de evasión y la instalación de los cómics orientales (mangas) y sus múltiples temáticas e historias autoconclusivas; si los nuevos lectores pueden ser atraídos como sea, tienen que encontrar un Spider-man lo más cercano posible al que han visto en otros medios, películas animaciones o juegos electrónicos: ¿Nuevos enemigos? ¿Publicación tres veces al mes para llegar pronto a un numero de celebración? ¿Una aparición extraordinaria del primer presidente negro de los EEUU, fan declarado del personaje? Todo es válido para atraer la atención de los potenciales lectores. Incluso borrar decadas de historia pasada que solo limita las posibilidades narrativas.

La critica, proveniente de los sectores más tradicionalistas de los aficionados (los más "adultos") y que se acallan con cada día que pasa, invocan que lo que caracterizó a Spider-man (y por extensión a Marvel) en sus orígenes es esa sensación de que todo ocurría en el mismo universo real en que se mueven los lectores, a la misma velocidad. Ha dejado de crecer como persona para ser un ícono de características fijas, que nunca cambiara, cualquier cambió será una ilusión. Que ha perdido aquello que lesatrajo del personaje. Y al parecer, las ventas en este año han demostrado que Quesada tenía razón. No importa la continuidad mientras las historias se vendan.

Ahora, eso nos hace preguntarnos si el cómic mismo no es un medio de expresión por si mismo sino un comercial para los otros productos derivados de Marvel ¿Serán las otras divisiones de Marvel Entertaiment después más importantes que la casa que Stan (y Jack y Steve) construyó? ¿Es esto válido?

Por supuesto, es el negocio del espectáculo. Y todos recurren a estos trucos.

Porque en la Distinguida Competencia ocurren cosas muy similares…

Continuará… (La próxima semana, no el próximo año).

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